En dicho acto estuvo presente el alcalde de la localidad, el presidente diocesano de la adoración nocturna, el párroco de la localidad y la presidenta de la agrupación arciprestal de cofradías y hermandades. En primer lugar tomo la palabra la presidenta de la sección de Porcuna, la cual narro a los presentes la historia de la celebración de la fiesta de la espiga y dio unas pinceladas históricas sobre la sección adoradora de Porcuna, también, durante su intervención, explico a los presente el carisma de la adoración nocturna española y el hacer de los adoradores durante las vigilias.
Tras esta intervención tomo la palabra la presidenta de la agrupación de cofradías, en representación del adorador D. Juan Antonio Pérez que no pudo asistir a dicho acto por motivos familiares, durante la intervención acerco a todos los presentes al misterio eucarístico.
Continuo el acto con la presentación del cartel, el cual es obra de Dª. Concepción Pérez, la cual pinto una gran obra, que como ella misma describe representa: “la Eucaristía en Porcuna con la gloria de la Asunción de Julio Romero de Torres, alguna de las custodias parroquiales y una imagen de Porcuna, el lema del cartel debía de ser Vigilia Diocesana de Espigas”. En este bello cartel, cobra especial protagonismo la custodia barroca del siglo XVIII de la parroquia de esta localidad, la cual alberga a S.D.M. cada día del Corpus Christi, por ello, la autora quiso que la misma apareciera en este cartel, bajo esta una estampa representativa del paisaje de la localidad. En palabras de la autora: “he buscado hacer una composición serena y equilibrada, que esté a la altura de este gran acontecimiento para nuestra comunidad”
Finalizo el acto con unas palabras de D. José Pérez, miembro del consejo pastoral, el cual agradeció a todos los presentes su asistencia en dicho acto, así como a las autoridades locales y al consejo diocesano por permitir a esta sección organizar dicho acto.
Así pues, con este primer acto, quedaron todos los adoradores y vecinos de la localidad a preparar y vivir esta cita eucarística con intensidad y ferviente amor a Jesús, la cual supondrá un revulsivo para la sección adoradora y toda la iglesia de Porcuna.